Lealtades invisibles

Hasta dónde somos dueños de nuestra vida, y de nuestra felicidad?

Muchas veces teniendo todas las condiciones para ser felices no podemos serlo.

Otras nos preguntamos “que he hecho yo para merecer esto”.

Resulta que en muchos casos no se trata de lo que uno hizo sino de lo que han hecho nuestros ancestros.

Es que: como un hilo invisible estamos unidos a ellos y sus destinos, así como al producto de sus acciones, en especial cuando involucraron perjuicio hacia otras personas. Podría entenderse algo así como un karma pero transgeneracional.

Los sistemas humanos no toleran las exclusiones, es decir, tienen su costo para los descendientes.

Estos son algunos de los hechos, que por dejar una profunda huella, pueden ir “marcando” a varias generaciones de una familia:

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La muerte prematura de hijos, padres o abuelos.

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Divorcios, parejas anteriores, incluso de padres y/o abuelos.

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Accidentes trágicos donde muere un miembro de la familia.

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Abortos provocados y naturales.

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Un miembro de la familia es juzgado, excluido, considerado como la Oveja Negra.

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Sucesos de Guerra.

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Supervivencia – Culpa - Pérdidas.

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Adopciones.

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Una madre muere dando a luz.

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Violaciones, abusos, injusticias graves, etc.

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¿Muertes tempranas o prematuras? Nos referimos a alguien que haya muerto menor de 25 años, o como padre o madre con niños menores de 15 años.
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También cuentan los bebés nacidos muertos.

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¿Alguien murió en el parto? Son especialmente importantes las enfermedades o muertes durante o después del parto (incluso si se trata de una abuela).

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¿Suicidios o intentos de suicidios?

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¿Crímenes? (especialmente asesinatos) .

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¿Alguien estafado? (Por ej.: ¿de su herencia?).

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¿Alguien fue calumniado o rechazado, desterrado, internado en psiquiátricos?

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Destinos o Incidentes graves.

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¿Niños ilegítimos o niños que se dieron en adopción o abandonaron?

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¿Enfermedades graves o discapacidades?

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¿Padres de nacionalidades o culturas diferentes?

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¿Emigrantes?

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¿Hubo relaciones anteriores importantes de los padres? (Por ej.: Matrimonios, novios o primeros amores?)

En cualquiera de las situaciones recién citadas alguien fue excluído del sistema ( para protegernos del dolor evitamos hablar de alguien y sin darnos cuenta lo excluimos)

Luego ese excluído será representado por un descendiente, por ej. un nieto: ya sea repitiendo su destino o sufriendo grandes limitaciones, dolores o imposibilidades en su vida, etc.

Aún sin saberlo podemos ser leales a nuestro sistema no yendo más allá de lo “permitido” por ej:

- no realizando nuestra vocación,

- no ganando suficiente dinero,

- no siendo exitosos

- no pudiendo establecer una pareja,

- padeciendo enfermedades, solo por nombras algunas de la formas en que se manifiesta.

Tomar conciencia de estas conexiones, honrarlas y sanarlas nos permitirá luego transmutar lo que limitaba en una fuerza que nos apoyará para hacer algo bueno con nuestra vida.